Gracias, Padre, destapamos -como una bebida refrescante- otra semana, otro gesto de tu amor hacia nosotros! Nos acompaña tu Palabra: "Nadie le echa un remiendo de paño sin remojar a un manto pasado; porque la pieza tira del manto, lo nuevo de lo viejo, y deja un roto peor. Nadie echa vino nuevo en odres viejos; porque revienta los odres, y se pierden el vino y los odres; a vino nuevo, odres nuevos»🏆🎳🎨No podría venir de Dios el sentirnos viejos, si Cristo es el Vino Nuevo, y lo recibimos, entonces, nos convertimos nosotros en los odres nuevos! 💇👰👏Hoy, de ser así, por qué no cuidamos de dejar nuestras "mañas" de viejos? Necesitamos urgentemente propiciar los cambios, la novedad y la vitalidad que Dios quiere! Woao! Se acerca... 2⃣1⃣➕2⃣!!!!
P. Francisco A. Méndez S. SDB
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