Mantener informada a la Comunidad Salesiana de las actividades desarrolladas en las Obras donde hacemos vida en San Félix Edo Bolívar, Centro de Capacitación Laboral Don Bosco, Casa Hogar Miguel Magone, Centro Juvenil Don Bosco, la Parroquia Don Bosco; incluyendo las actividades de las Capillas que la conforman y empezar a saborear los valores del Reino en y con nuestra feligresía en comunidad
lunes, 26 de enero de 2015
domingo, 25 de enero de 2015
Homilia del Domingo 25 de enero del 2015 - ¿Qué motiva a algunos a seguir a Jesús?
Lectura del santo evangelio según san Marcos (1,14-20):
Cuando arrestaron a Juan, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios. Decía: «Se ha cumplido el plazo, está cerca el reino de Dios: convertíos y creed en el Evangelio.»Pasando junto al lago de Galilea, vio a Simón y a su hermano Andrés, que eran pescadores y estaban echando el copo en el lago. Jesús les dijo: «Venid conmigo y os haré pescadores de hombres.» Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron. Un poco más adelante vio a Santiago, hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca repasando las redes. Los llamó, dejaron a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros y se marcharon con él.
Predicador: Pbro. Victor Tarazona sdb
La alegría de la conversión
En la primera lectura se nos narra el anuncio de Jonás y la conversión de los ninivitas. Es el relato de la eficacia de la Palabra de Dios, que se cumple, a pesar del mensajero, porque, en efecto, Jonás no es el más convencido de que debe anunciar la conversión a Ninive, de hecho, no se esfuerza mucho en convencerles, pero la Palabra de Dios actúa en los corazones de quienes escuchan, y éstos se convierten.
La conversión, así, es en primer término alegría para Dios, quien desea que todos los corazones se conviertan y empredan esa revisión de vida que impregna a toda la persona humana, no sólo un aspecto de la misma.
Si las palabras de uno que no estaba del todo convencido, calaron en el pueblo ninivita, ¡cuánto más la palabra de Jesús quien está absolutamente convencido del mensaje que vive y anuncia!
En lo de Jesús sólo hay vivencias, nada de palabras vacías… Jesús es el apasionado por el Reino por excelencia, nos transmite no la ilusión de un porvenir quién sabe cuándo, sino la convicción de un proyecto, del proyecto de Dios para los seres humanos, para cada uno de nosotros.
Jesús habla de Dios, del Reino de Dios, en éste nuestro tiempo cumplido, nuestro tiempo favorable, no debemos esperar más, no podemos esperar más, todas las promesas de Dios se realizan en nuestro hoy concreto, por ello se nos acerca el Reino de Dios, éste no es una utopía que nunca veremos realizada, es una esperanza que se empieza a cumplir, a vivenciar, en nuestro presente, porque se nos es dada como un regalo para que empecemos a disfrutar, en el ya pero todavía no, en el ahora que sólo tendrá su plenitud al final de los tiempos.
Este tiempo favorable pide de nosotros la conversión, que no es otra cosa que afinar nuestros corazones a Dios, procurar vivir lo de Dios, pensar como Dios, sentir como Dios…. En otras palabras, configurarnos a Cristo.
El proyecto de Dios no es en solitario, se realiza en el encuentro, en la relación, por ello Jesús forma comunidad, la comunidad de sus seguidores y seguidoras, no personas que no tienen nada qué hacer, sino personas trabajadoras que han de saber dar el todo por Cristo, Toda la existencia, no un poco nada más….
“Tú, el Cristo,
ofreces un tesoro de Evangelio,
depositas en nosotros un don único,
el de ser portadores de tu vida.
Pero, para que sea evidente
que la irradiación viene de ti
y no de nosotros,
has depositado este don insustituible
en vasos de arcilla,
en corazones de pobres,
tú vienes a tomar un lugar
en la fragilidad de nuestros seres,
allí y no en otra parte.
Entonces, sin que sepamos cómo,
haces de nosotros, tan insuficientes y vulnerables,
la irradiación de tu presencia entre los hombres”.
Hermano Roger de Taizé (+2005)
jueves, 22 de enero de 2015
Conociendo sobre la Presencia Salesiana en San Felix (I Parte)

San Félix (1973): una propuesta para los jóvenes desocupados
En la actualidad, los Salesianos llevan adelante un conjunto de obras que abarcan la Parroquia San Juan Bosco, el Centro Juvenil y el Centro de Capacitación Industrial Don Bosco. La historia, sin embargo,se remonta al año 1968, cuando el P. José Vicente Henríquez, Inspector, nombró una Comisión Salesiana (Esa Comisión estaba integrada por los Padres Francisco Visentín, Ricardo Urbanski, Alejandro Moreno, Miguel Martínez y los Coadjutores Sr. Sebastián Pagliero y Sr. Juan Cogo); la cual debía relacionarse con la Gerenciade Relaciones Públicas de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) afin de recoger datos que ayudaran en el trabajo de la reestructuración de la Inspectoría y programar futuras presencias en esas zonas.En la zona de Ciudad Guayana se estaba ejecutando un vastísimo plan de desarrollo, pensando que se convertiría en el polo industrial más grande del país e, incluso, que llegaría a ser uno de los mayores del mundo. En efecto—decía el informe de la Comisión—, la zona es riquísima en materias primas y en energía eléctrica y sobre estas bases se han desarrollado y a varias industrias básicas, y éstas darán origen a una infinidad de otras industrias a las que ofrecerán materia prima. Se calculaba en 1000 personas por mes, calculando que en 1975 la ciudad superaría los 350.000 habitantes.
La Comisión comprobó la escasez de escuelas e Institutos educativos,y detectó la urgencia de Escuelas Técnicas e Industriales que preparen adecuada mano de obra, capacitando competentemente a los futuros obreros.También la Comisión comprobó la escasa formación socio-religiosa y, junto con la CVG, decidieron plantear iniciativas bien planificadas para ayudar a solucionar el problema. En las conclusiones la Comisión señalaba amplias posibilidades para la Congregación Salesiana en la región, tanto en el campo técnico, como en el sector agrícola y, evidentemente, en el pastoral, y, entre otras sugerencias, aconsejaba instalar un Centro Juvenil en Ciudad Guayana,a ser posible al lado de una parroquia y, con el tiempo, promover una Escuela Técnica Industrial en Ciudad Guayana.
Fuente: Merino G. Amador sdb (2011). Los Salesianos en Venezuela Volumen I. Caracas Venezuela. Taller escuela Técnica Popular Don Bosco.
Continuará ...
En el marco de los 200 años del Nacimiento de Don Bosco y los 40 años de erección canónica de la Parroquía Don Bosco
lunes, 19 de enero de 2015
domingo, 18 de enero de 2015
Homilia del Domingo 18 de enero del 2015 - ¿Dios necesita colaboradores?
Lectura del santo evangelio según san Juan (1,35-42):
Vieron dónde vivía y se quedaron con Él
En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en Jesús que pasaba, dice: «Éste es el Cordero de Dios.» Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús. Jesús se volvió y, al ver que lo seguían, les pregunta: «¿Qué buscáis?» Ellos le contestaron: «Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?» Él les dijo: «Venid y lo veréis.» Entonces fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con él aquel día; serían las cuatro de la tarde. Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús; encuentra primero a su hermano Simón y le dice: «Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo).»Y lo llevó a Jesús. Jesús se le quedó mirando y le dijo: «Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que se traduce Pedro).»
Reflexión: Habla Señor que tu siervo escucha
La liturgia de hoy nos recuerda cómo el Señor nos va llamando a cada uno, no discrimina, Él mira directo al corazón. Así con el joven Samuel lo llama desde muy temprano, es tan joven que, dice el texto bíblico, no reconoce la Voz que le está llamando, esto nos habla de la importancia de la comunidad para ayudar a discernir la voz del Buen Padre Dios y la llamada que nos va realizando a cada uno, una comunidad que esté atenta para reconocer cómo el Señor habla en cada persona y en cada acontecimiento, una comunidad que no tenga miedo de decirle al joven Samuel, cuando te llame, responde: habla Señor que tu siervo Escucha.
Una comunidad que está atenta al paso del Señor, como Juan el Bautista, que no se queda para sí a los hijos, sino que sabe orientarlos y decirles claramente:Este es el Cordero de Dios. en ocasiones nos da cierto temor de presentar abiertamente a Cristo y su Evangelio, y más bien nos presentamos a nosotros mismos, queremos hacer discípulos para nosotros y no para el Señor. Sólo el encuentro con Cristo vivo y verdadero nos ayudará a romper nuestros miedos y a anunciarle a tiempo y destiempo, para que todos lo conozcan y crean en Él y le sigan.
Encontrarse con Cristo es entrar en una relación vital con Él, no es cosa de un momento, es compartir con Él su manera de vivir. Es quedarse con Él toda la tarde. Un quedarse que implica luego un anuncio, hemos encontrado al Mesías. No encontramos a Cristo, ni nos encontramos con Él, para esconderlo, sino para mostrarlo, llevarlo a todos, si no lo hacemos nuestros hermanos podrían no tener la oportunidad de encontrarse con Él ni de experimentar como nos cambia la vida.

jueves, 15 de enero de 2015
lunes, 12 de enero de 2015
domingo, 11 de enero de 2015
Homilia del Domingo 11 de enero del 2015 - Bautismo del Señor
Predicador: Pbro. Víctor Tarazona
San Marcos: 1, 7-11: Tú eres mi Hijo amado; yo tengo en ti mis complacencias.
En aquel tiempo, Juan predicaba diciendo: "Ya viene detrás de mí uno que es más poderoso que yo, uno ante quien no merezco ni siquiera inclinarme para desatarle la correa de sus sandalias. Yo los he bautizado a ustedes con agua, pero él los bautizará con el Espíritu Santo". Por esos días, vino Jesús desde Nazaret de Galilea y fue bautizado por Juan en el Jordán. Al salir Jesús del agua, vio que los cielos se rasgaban y que el Espíritu, en figura de paloma, descendía sobre él. Se oyó entonces una voz del cielo que decía:"Tú eres mi Hijo amado; yo tengo en ti mis complacencias".
Reflexión:
Habíamos estado tanto tiempo alejados de Dios, teníamos esa sensación de aplastante silencio, de opresión en el pecho, no podíamos respirar. ¡Qué lejos habían quedado los tiempos de los profetas! La manifestaciones de Dios sólo nos parecía historias que se les cuenta a los niños para dormir. Una especie de muro se erguía entre nosotros y Dios, los cielos estaban cerrados y, además, nos empeñamos en construir barreras y más barreras para permanecer así.
Jesús vio rasgarse el cielo sobre Él. Y experimentó que el Espíritu descendía sobre Él.Por fin era posible el encuentro con Dios. Sobre la tierra caminaba un hombre lleno del Espíritu de Dios. Se llamaba Jesús y venía de Nazaret.
Ese Espíritu que desciende sobre él es el aliento de Dios que crea la vida, la fuerza que renueva y cura a los vivientes, el amor que lo transforma todo. Por eso Jesús se dedica a liberar la vida, a curarla y hacerla más humana. Los primeros cristianos no quisieron ser confundidos con los discípulos del Bautista. Ellos se sentían bautizados por Jesús con su Espíritu.
Sin ese Espíritu todo se apaga en el cristianismo. La confianza en Dios desaparece. La fe se debilita. Jesús queda reducido a un personaje del pasado, el Evangelio se convierte en letra muerta. El amor se enfría y la Iglesia no pasa de ser una institución religiosa más.
Sin el Espíritu de Jesús, la libertad se ahoga, la alegría se apaga, la celebración se convierte en costumbre, la comunión se resquebraja. Sin el Espíritu la misión se olvida, la esperanza muere, los miedos crecen, el seguimiento a Jesús termina en mediocridad religiosa.

sábado, 10 de enero de 2015
jueves, 8 de enero de 2015
lunes, 5 de enero de 2015
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